miércoles, 24 de octubre de 2012

El poder de la disciplina



El gran poder que tiene la disciplina es el de enseñar a pensar a nuestros hijos. Como seres humanos imperfectos tendemos a hacer lo malo o lo que nos perjudica.

Esto lo puedes ver claramente en los niños, cuando hacen cosas que son malas para ellos, quieren tocar los enchufes o la basura. Un niño no tiene la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo.  Y muchas veces lo hacen aunque tu les hayas avisado de las consecuencias.

Son los padres los que deben inculcar valores a sus hijos, estos valores van a ser una protección en su vida adulta.

La disciplina

En el pasado la disciplina se ha ganando mala prensa porque se a asociado a pensamientos autoritarios y hasta violentos. Podemos recordar casos de padres que pensaban que pegar era disciplinar, nada más lejos de la realidad.  Si estas enfadado no es tiempo de disciplinar, es tiempo de reflexionar y cumplir con tu palabra.

Vemos que muchos padres quieren disciplinar solo cuando sus hijos los han llevado al límite de su paciencia, esto está mal, porque estando enfadado no vas a enseñar, lo que vas hacer es sacar tu ira y frustración, sentimientos que tenemos que aprender a controlar como adultos responsables.

Mantener la palabra

La disciplina va ayudar a tus hijos a pensar por sí mismos cuando sean adultos. Y lo que es más importante, les va a enseñar a obedecerse a sí mismo. Esto es ponerse una meta y cumplirla o proponerse dejar un mal hábito y dejarlo.

La buena disciplina incluye ver las consecuencias de lo que hemos hecho mal. Esta es la ley de la causa y efecto. Todo lo que hacemos tienen efecto en nuestra vida y en la de los demás, por eso es tan importante pensar antes de actuar, algo que no suelen hacer los niños pequeños.

Con mantener la palabra me refiero a si prometiste castigar a tu hijo como forma de disciplina, debes cumplir, su mala conducta debe tener unas consecuencias.  La próxima vez que quiera hacer algo que no es correcto va a pensar antes de hacerlo.

Dependiendo de la edad de tu hijo, las consecuencias pueden tener distintas formas. Puede ser no hacerle caso unos segundos o minutos, hasta prohibirle cosas que le guste hacer como ver la tele o jugar a los video juegos.

La mejor enseñanza

La mejor enseñanza que le puedes dar a tu hijo es la capacidad de pensar por si mismo, algo que algunos adultos no logran nunca, esta capacidad de pensar lo va a proteger de las malas consecuencias de la mala conducta.

Creo que el gran secreto de la disciplina efectiva es la conversación franca y sincera con los hijos, conversar hasta lograr tocar su corazón.